La cultura maya sigue viva en las comunidades de México y Guatemala, donde tuvimos la suerte de convivir.
Se aprecia el sincretismo entre la imposición católica y tradiciones maya: van a la capilla a rezar, pero también rezan a Jim Kax, dios del maíz, o a Chaac, el dios de la lluvia, para que bendigan sus cosechas. Creen en Dios y en el poder de las yerbas, de las plantas medicinales y los brebajes, en los sacerdotes maya, en los queseros, yerbateros y curanderos.
Tuvimos la suerte de estar con ellos en Yucatán en la celebración del Día de las lenguas maternas: Jaranas yucatecas, bombas (chistes en maya), discursos de defensa de la lengua maya… Los niños bailaron la danza del venado, y las familias compartieron platillos en comunidad: chaya (una especie de acelga hervida), pepita de calabaza, frijol refrito… tuvimos la oportunidad de compartir muchas pláticas con las madres de familia, que nos hablan de sus tradiciones.
Las mujeres visten hipiles y ternos. Los hipiles son batines blancos de coloridas flores bordadas que usan cada día para sus quehaceres. Los ternos son festivos, llevan volantes y encajes además de los bordados. Me acerco a una señora muy guapa que va cargando una bebé.
-¿Y este bebé tan bonito? Kitchpan! Bix a k´aba? - pregunto a una señora que sostiene a una niñita preciosa. Le digo guapa en mi maya principiante y le pregunto el nombre de la bebé. O eso creo yo. La señora se ríe tímidamente y me responde en maya.
-In k´abai Mila. Me preguntaste cómo yo me llamo.
-¡Jajaja Mila qué nombre más bonito! ¿Y la bebé?
-Le tie uk´abae Lupita
-¡Lupita! Haipe año ñantecth?- La señora se ríe a carcajadas. Le llamo señora, pero luego la miro a los ojos. Realmente es mucho más joven que yo y ya tiene 5 hijos y la piel curtida de una mujer de 50.
-¡Me preguntas cuantos años yo tengo!- se ríe de nuevo. Esta vez también ríen dos mujeres a su derecha.
-¡Uy no perdona! Me refería a la niña. ¡Mi maya es muy malo! Tengo que aprender mejor…
-¡No no está bien su maya! Le ti ox. Tres meses ella. Mero hizo su Hetzmek
-Perdón, ¿su qué?- La señora se ríe. Su risa suena fresca y clara, pura. Le llamo señora, pero luego la miro a los ojos. Realmente es mucho más joven que yo y ya tiene 5 hijos y la piel curtida de una mujer de 50.
-Hetzmek. Es su fiesta de maya- dice esbozando una enorme sonrisa, mirando a su bebé
-¿Y qué se hace en Hetzmek?
-Hetzmek es bautizo maya. Es cuando agarras bebé así ves- tumba a la niña arrullándola en los brazos y luego la carga contra sí, a un costado de la cadera, con las piernitas separadas
-¡Ahhhh vale! Es cuando ya se sostiene más solita ¿no?
-Sí, ya se puede sujetar solita su cabeza
-¿Y cómo lo celebráis?- me siento a su lado.
-Es depende si niño o niña. Si niño con 4 meses, si niña con 3 meses hace. Se reúne familia en la casa, se come. La chaya, la pepita, la tortilla. Vienen sus padrinos de ella que la cargan de primera vez así- responde Marta, la señora de al lado. Se su nombre porque es esposa de Pablo, el comisario de la comunidad. Marta me sigue contando- se coloca mesa con mantel y velas, y flores, y los platos con las comidas que el bebé lo prueba ese día. También la Virgen de Guadalupe se pone, porque le protege a su bebé. Y se da vueltas de alrededor de mesa con las comidas. Pa un lao y pal otro.
-¿Quién?
-Padrino con la bebé así pa un lao y pal otro de la mesa. La niña de bebé su madrina la agarra y se da 9 vueltas en la mesa, y luego padrino la agarra y otras 9 vueltas al otro lado.
Marta me cuenta que con las niñas la ceremonia la empieza la madrina y con los niños, padrino. Usualmente los padrinos son parientes de la familia o personas muy allegadas de la comunidad, con quienes se refuerzan los vínculos de compadrazgo. Desde ese momento, a los padrinos se les llama compadres. Los padrinos regalan al bebé la ropa que visten ese día. Esta ceremonia se aúna con el bautismo católico. Se puede realizar antes del bautizo de la criatura, el mismo día del bautizo o en fechas posteriores a la celebración católica. Cuando el bebé colocado en la posición de hetzmek es una niña, la madrina procede a dar nueve vueltas alrededor de la mesa. La primera serie de vueltas comúnmente se realiza girando en dirección de las agujas del reloj. Al finalizar esta primera serie de vueltas la madrina entrega la niña al padrino, quien también dará otras nueve vueltas, pero esta vez en sentido inverso.
-Y se comen las comidas, el huevo, la pepita de calabaza, la chaya con sal- esta vez es Mila la que habla, la mamá de Lupita- el bebé sujeta su machete también
-¿Cómo?- mi cara les hizo reír
-Sí, sus trabajos de ellos. Bebé sujeta machete y hacha si niño, pa que aprenda a trabajar el campo; agujas, y comal, si niña, pa que aprenda sus quehaceres. También cuaderno y lápiz pa que aprenda a leer y escribir bien
Me siguen contando. Según entiendo, al finalizar las vueltas, el bebé es entregado a sus padres, quienes agradecen a los padrinos el haber hecho hetzmek a su bebé. Finalmente se reparten entre los asistentes —parientes y vecinos invitados— los alimentos principales de la ceremonia, y en algunos casos se sirve una comida especialmente preparada para ellos.
Así es que aprendí sobre esta bonita ceremonia, que para los mayas significa que ha llegado la hora de inculcar la ley de la enseñanza y que recibe su nombre de la forma en que se abraza a la criatura por primera vez, colocándola a horcajadas sobre la cadera izquierda de los padrinos. El hetzmek es un ritual doméstico que es practicado en la actualidad, principalmente pero no exclusivamente, por la población de ascendencia indígena y campesina de Yucatán. Sin embargo, esta ceremonia no es privativa de Yucatán; además de celebrarse en Quintana Roo y Belice, donde recibe el mismo nombre, se realiza con otros nombres en otros estados del país y por otros grupos étnicos. Los lacandones que habitan las tierras bajas de Chiapas realizan una ceremonia que llaman mekik utiar. Este término, al igual que el hetzmek, se traduce como "llevar la criatura a horcajadas sobre la cadera".
En maya, Hetz o jéets quiere decir "aligerar", "aliviar la carga", y mek o méek se traduce como “abrazar"