Si vas a trabajar como voluntario con niños en Perú en el campo de la educación, es importante que conozcas un poco el contexto en el que vas a trabajar. Perú es un país con enormes cualidades, riquezas e historia, pero su sistema educativo se aqueja de varios problemas que hace que no de una cobertura justa a los niños y que no responda a las necesidades actuales de los más pequeños. Aún existe una tasa alta de analfabetismo y violencia en las escuelas. Y te preguntarás, ¿Por qué?
En mi opinión, existen varios factores que aumentan la problemática.
Uno de ellos es la enorme desigualdad entre clases sociales y entre departamentos. El departamento de Loreto (donde se encuentra la asociación La Restinga, con la que trabajé) obtiene los peores resultados académicos de todo el Perú. El contexto sociocultural tampoco ayuda, y viene de generaciones.
La pobreza y las condiciones de vida y trabajo a las que se someten las familias desde muy pequeños hacen que la tasa de abandono escolar vaya en aumento. Los niños no van al colegio porque sus familias necesitan que trabajen el negocio.
Esto solo hace que aflore más y más la idea de que la escuela tampoco es tan importante y los niños entran en un bucle de lo que considero una especie de “indefensión aprendida” Mis padres no fueron a la escuela y yo hago lo mismo, porque es lo que he visto y no seré capaz de convertirme en otra cosa. Pocos son los niños que por sí solos tienen la iniciativa de cambiar su futuro y recibir voluntariamente una formación sin la ayuda directa de sus familias.
Por otro lado se observa el tema de la formación del profesorado. Deja mucho que desear y en su mayoría siguen manteniendo ese sistema tradicional de enseñanza muchas veces basado en castigos físicos y que no atienden las necesidades individuales de los que más necesitan ser atendidos. A los niños que no van bien, les van pasando de curso simplemente. No hay refuerzos educativos ni programas de atención específica al alumnado con dificultades. Es la ley del más fuerte: si vas bien enhorabuena, pero si vas mal lo sentimos. El profesorado está para llegar, soltar la lección y o la entiendes o te quedas atrás. Los salarios del profesorado tampoco son un factor motivacional que ayude en esta problemática. Reciben un sueldo bastante escaso para la cantidad de trabajo, la enorme ratio de las aulas y los problemas de conducta a los que a veces tienen que enfrentarse. Si además no tienes herramientas para solventarlos, la desmotivación va en aumento y muchos acaban dejando sus empleos o, simplemente, acuden a trabajar sin motivación ni entrega alguna.
Además de todo esto, la violencia y abuso en las aulas es un tema preocupante, y en la mayor parte de los casos el alumno no es escuchado y acaba renegando de la escuela.
Te dejo aquí un artículo que quizá pueda interesarte, y un documental en el que uno de los miembros de La Restinga, Jackson, que trabaja con los adolescentes de Pueblo Libre en Iquitos, explica junto con otros expertos en educación la problemática de la violencia en las aulas peruanas.
Espero que te sirvan de ayuda para comprender mejor la realidad educativa de Perú.
https://elcomercio.pe/economia/peru/tres-problemas-existen-sector-educacion-peru-167206